¡Subscribite a nuestro newsletter!

¿Qué hay que tomar en cuenta antes de tapizar tus muebles?

Luego de un tiempo, nuestros muebles suelen necesitar un poco de ayuda y remodelación para seguir luciendo en óptimas condiciones, ya sea por el desgaste de los mismos, o porque necesitan una renovación de estilo. Muchas personas enseguida optan por deshacerse de estos y comprar unos nuevos, pero si eres más ahorrativo y de mentalidad ecologista, más bien buscarás darles una segunda oportunidad, por ejemplo tapizándolos.

Esta es una excelente opción para darle una segunda vida útil a tus muebles o incluso una solución que te puede salvar de un percance, solo que hay que saber bien como hacerlo para que de verdad nuestros muebles queden bien y se haga una inversión inteligente.

Si es verdad que muchas veces esta decisión puede salir más costosa que comprar los muebles en un almacén, pero, incluso en eso casos te estás permitiendo rediseñar los muebles del material que elijas, a tu gusto personal y dejándolos como piezas realmente únicas, ya que tu podrá ser quien elija, el material, el color, el diseño, el estampado y demás.

Y es que hay muchísimas razones por las que tapizar un mueble, en cualquier caso, es una excelente decisión. Esto, siempre que sepamos tomar ciertos aspectos importantes en cuenta. Nuestros amigos de Curtidos y Tapicería, expertos en materia, nos comentan que hay que evaluar antes de tapizar nuestros muebles.

Calidad del mueble

Si tus muebles son antiguos entonces son unas piezas perfectas para tapizar, y es que estos están hechos de una calidad y durabilidad que ya no se suele ver en el mercado, por lo que es bueno hacer lo que esté en nuestras manos para continuar dándoles vida útil en nuestra casa.

Por el contrario, si hablamos de muebles de segunda mano, que de repente adquiriste en un almacén low cost, pues hay que pensar si el tiempo que estos te durarán compensará el gasto que harás en el tapizado, o si es mejor decirle adiós y comprar unos nuevos.

Revisa su estado

Hay que también evaluar las razones por las que necesitamos darle una manita a nuestros muebles. Por ejemplo, si el defecto es que con el paso del tiempo y el uso que se les ha dado ha terminado deformando el mueble, pues esto no es algo que un tapizado vaya a arreglar y lo que haríamos serían invertir tiempo y trabajo en un mueble que igual seguirá siendo poco funcional.

En este caso, si no quieres deshacerte de ellos y comprar unos nuevos tienes que tomar en cuenta que también tendrás que arreglar su estructura. Por ejemplo, colocando relleno nuevo antes de tapizar. Para ello debes elegir relleno de alta densidad. El más utilizado es la espuma de poliuretano con una densidad de unos 30-35 kg/m3, conocida como HR, que proporciona, además de durabilidad, gran comodidad y gran velocidad de recuperación de su forma.

Elección de la tela 

Si ya tu mueble está listo y ha pasado las evaluaciones para ser tapizado, pasamos a elegir la tela. Esta es una decisión igual de importante que las anteriores ya que será la que defina la calidad del mueble de ahora en adelante.

Entonces hay que evaluar el tipo de mueble, el uso que se le va a dar y el tipo de estilo. Aquí algunas opciones para tener en cuenta:

  • Las fibras textiles son la materia prima de la que se saca el hilo con la que se teje la tela. Estas pueden ser naturales, recogidas de la naturaleza, como el algodón, el lino o la seda; artificiales, modificadas de materias naturales, como el rayón; o sintéticas, elaboradas en un laboratorio, como el nylon o el poliéster.
  • Por su parte, los tejidos son los que se construyen con las fibras textiles tejiendo hilos a lo largo de la tela o con otros que van a lo ancho de la tela. Según cómo se manejen ambos, la tela tendrá diferentes acabados para elegir: chenilla, terciopelo, Jacquard, etc. De esta forma, podemos tener opciones que son terciopelo de algodón o terciopelo de poliéster. Lo primero indica la forma en que la tela está tejida, el tejido, y lo segundo, la fibra textil con la que está confeccionada la tela. Los más recomendados son la chenilla, por su durabilidad, o el terciopelo, que además es muy agradable al tacto.
  • Por último, las telas pueden tejerse con hilos de fibras naturales o sintéticas, siendo las más recomendadas aquellas que no se arruguen mucho, que sean fáciles de limpiar y que sean de fibra natural.

Test Martindale

Cuando estamos eligiendo la tela para el  tapizado, debemos aplicar un test muy importante, el Test Martindale, que es el que se encarga de medir la resistencia de abrasión de la tela en cuestión.

La prueba consiste en frotar repetidamente en círculos el tejido mediante unos discos para comprobar su tiempo de desgaste. Cada movimiento circular es un ciclo Martindale. A mayor número de ciclos mayor resistencia. De esta forma, tenemos la siguiente clasificación:

  • 000 o menos ciclos Martindale: Uso decorativo con escaso uso. Por ejemplo, unos cojines decorativos en el dormitorio de invitados.
  • 000 a 15.000 ciclos Martindale: Uso ocasional. Por ejemplo, una descalzadora en el hall de entrada o un pie de cama en el dormitorio de invitados.
  • 000 a 25.000 ciclos Martindale: Uso diario, como para sillas o butacas de uso cotidiano.
  • 000 a 30.000 ciclos Martindale: Uso doméstico intenso, como para sofás de uso acentuado.
  • 000 a 50.000 ciclos Martindale: Uso comercial. Ideal para hoteles, restaurantes, oficinas, etc.
  • 000 o más ciclos Martindale: Uso comercial intenso. Perfecto para salas de conferencias, salas de cine, transporte público, etc.

Cantidad de tela según tipo de mueble

Por supuesto, también habrá que tomar en cuenta la cantidad de tela que vamos a necesitar, sobre todo para calcular el presupuesto final de gasto.

Las telas tapiceras normalmente tienen de ancho 1,40 metros, aunque hay algunas de doble ancho, de 2,80 metros, estas últimas comúnmente utilizadas parar cortinas, sofás o butacas.

Entonces, aquí la cantidad de tela necesaria para distintos muebles que podrías querer tapizar:

  • Silla de comedor: 1 metro si solo está tapizado el asiento, 1,6 metros si también se tapiza el respaldo.
  • Butaca: entre 4-6 metros, dependiendo del tamaño de la butaca.
  • Sillón orejero:8-9 metros.
  • Sofá de 2 plazas:unos 12-14 metros.
  • Sofá de 3 plazas: unos 14-16 metros.
  • Cabecero liso cama 90cm: unos 2 metros.
  • Cabecero liso cama 150cm: unos 3 metros.

Sin embargo, el personal de Curtidos y Tapicerías te recomienda consultar con un profesional que te ayude a tomar las medidas de acuerdo a tu mueble, ya que a veces estas no son tan exactas, y varían de acuerdo a también, el tipo de tela que estamos escogiendo. Por ejemplo, está el caso de las telas estampadas en las que tenemos que hacer que los dibujos cumplan con un patrón exacto y por lo tanto nos obliga a adquirir entre un 10% y un 20% más de metraje.

Tips extra

  • Si tienes gatos en casa que acostumbren a afilarse las uñas en tus muebles, te recomendamos tejidos que tengan una trama no muy gruesa, ya que estas se verán mucho más apetecibles para ellos. Mejor apuesta por la microfibra, ya que se fabrica con una mezcla de fibras sintéticas, normalmente, poliéster y poliamida, y es muy resistente y se limpia fácilmente.
  • Te recomendamos dar un paso adelante y ponerle algo de protección antimanchas a tu tela. Por ejemplo, puedes aplicarle una capa de Teflón que la protegerá sin cambiar sus características originales. Esto porque el teflón repele los líquidos, que resbalan por la tela, y evita que las manchas profundicen en el tejido.
  • Suele pasar que si nuestros muebles están muy expuestos a la luz del sol, esta termina desgastando el color de los mismos. Para ello, te gustará saber que existen tests que miden la resistencia al sol de las telas en una escala del 1 al 8. Así, si estás buscando telas para exterior asegúrate de que tienen un rango alto de resistencia de 8 que sería la más alta, y así con cada mueble.
  • Debes asegurarte de que tu tapizado dura el mayor tiempo posible, por eso debes evaluar el tipo de mueble, de su uso y de la tela que estas eligiendo, siendo que un mueble de uso diario intenso a partir del séptimo año suele verse desmejorado y tendrías que volverlo a tapizar.

Retapizar

Por último, hablamos del retapizado, para el cual, si es tu caso, también debes evaluar ciertos aspectos:

  • En esta ocasión también hay que evaluar la duración que aun nos puede ofrecer el mueble y si es buena idea un segundo proceso de tapizado.
  • También hay que tener en cuenta el valor emocional del mueble, por ejemplo, si es un mueble familiar, una antigüedad, etc., ya que esto determinará cuanto de verdad quieres conservarlo y hacerlo pasar por un retapizado.
  • El tiempo desde su primer tapizado, para evaluar si ya es momento de que pase por una segunda mano.

 

Facebook
Pinterest
LinkedIn
Twitter
Email

Tambien te puede gustar

Scroll al inicio

Suscríbase a nuestro Newslette

Suscríbase hoy mismo a nuestro boletín electrónico para recibir información actualizada sobre las últimas noticias y ofertas especiales.