La pandemia ha dejado claro que nuestra vivienda tiene una importancia de lo más grande a la hora de construir una vida que sea de la máxima calidad posible para todos y cada uno de nosotros y nosotras. Con la cantidad de horas que hemos pasado en el hogar a causa de las restricciones de salida a la calle y de movilidad, quienes han tenido un hogar más acorde a sus expectativas han conseguido que la pandemia sea más llevadera. Sin embargo, quienes no han tenido esa suerte lo han podido pasar realmente mal. Así de triste es.
Como consecuencia de todo eso, muchas personas han tomado la decisión de cambiar de vivienda una vez que la cosa se ha calmado un poco. Ya no hay restricciones a la movilidad, ya podemos salir de casa a la hora que queramos otra vez, pero hay personas que lo han pasado tan mal en un hogar que presentaba algún tipo de defecto que ahora están decididas a cambiar de vivienda incluso aunque sepan que no van a existir nuevos confinamientos. A nosotros, desde luego, nos parece lógica esa decisión y, de hecho, no podemos parar de aplaudirla.
Una noticia que fue publicada por la agencia de noticias Europa Press indicaba que casi la mitad de los españoles quiere cambiar de vivienda de aquí a los próximos cinco años. La verdad es que no nos extraña que así sea. Prosperar en lo que a vivienda se refiere tiene mucho que ver con prosperar en lo que respecta a la vida. Y ese es el objetivo que, a fin de cuentas, todos y todas perseguimos. Ni que decir tiene que debemos poner toda la carne en el asador para conseguirlo. Solo de ese modo tendremos opciones para ser felices.
Una de las características que se ha erigido en inevitable para la vida de muchas personas en los tiempos que corren tiene que ver con el teletrabajo. Esa manera de trabajar ha ocasionado que muchas personas hayan tenido que adaptar su domicilio, instalando un ordenador y estableciendo un espacio de trabajo, a sus nuevas necesidades laborales. Como consecuencia, a muchas personas su casa ha empezado a quedárseles muy pequeña. No nos extraña que, a causa de esto, sean muchas las personas que han empezado a pensar en cambiar de domicilio. Se ha convertido en una situación muy habitual en el interior de nuestras fronteras.
Según una noticia publicada en la página web de El Independiente, más de la mitad de las personas que se encuentran teletrabajando en España quiere cambiar de casa en los próximos años. Es algo que, teniendo en cuenta lo que os hemos transmitido, nos parece realmente lógico y normal. La comodidad en el espacio de trabajo es algo que resulta necesario y que, en caso de no tener, nos genera una cantidad extraordinaria de problemas. La verdad es que no es para que nos tomemos el asunto a la ligera. Y es que el teletrabajo ha venido a nuestra vida para quedarse en muchos casos.
Son muchas las personas que han decidido no esperar más y que están cambiando de domicilio ya para hacer frente a las nuevas necesidades de espacio que requiere un aspecto como el teletrabajo. Nos lo han comentado en una conversación reciente los profesionales de Servieco. Según ellos, la cantidad de mudanzas que se están experimentando en el último año supera con creces las que se produjeron desde el primer trimestre de 2019 hasta el mismo momento del año siguiente, 2020, justo en los momentos previos a la llegada de la pandemia.
Una mejora brutal en lo que a calidad de vida respecta
El hogar es uno de los elementos que juega un papel más importante a la hora de hacer de nuestra vida algo mejor o peor. Por eso, hay que prestarle una especial atención. Y eso se consigue mediante una apuesta clara por el espacio. Cuanto más espacio, más fácil será que podamos vivir de un modo cómodo, incluso aunque tengamos que teletrabajar en algún lugar de nuestra vivienda. Mucha gente ya puede confirmar que lo que estamos comentando es tan real como la vida misma.
Está claro que debemos seguir haciendo todo lo posible por hacer de la vida algo alegre y feliz. Y parece ser que esa es una de las intenciones más grandes de los españoles en los últimos años, sobre todo después de las penalidades por las que hemos pasado en los últimos años. Se acabó el sufrimiento si realmente queremos que así sea. Y estamos convencidos de que así va a ser en la inmensa mayoría de los casos. Es hora de disfrutar de nuestro hogar. Y también de los nuestros. Nos lo hemos ganado a pulso todos y cada uno de nosotros y nosotras.