No es la primera vez, pero esta es muy dura. La industria textil se enfrenta a una de las crisis más dura que ha tenido en los últimos siglos. Sin embargo, fieles a su estilo, las empresas no quieren ver un desánimo en lo que está ocurriendo por culpa del COVID-19. Todo lo contrario, lo que quieren ver es una oportunidad. Es el momento de apostar por lo digital, lo ecológico y lo útil. Para guiar al sector hacia su renacimiento, la Asamblea General Europea reeligió a Alberto Paccanelli como presidente.
Echamos la mirada atrás y recordamos que las empresas de textil han demostrado ser esenciales para gestionar la pandemia. Un buen número de ellas se supieron reinventar y convirtieron su producción para hacer EPP y material sanitario. Esa es la esencia de estas empresas. Pero no hay que olvidar que sin materiales textiles, tampoco se pueden hacer automóviles, ropa, máquinas o incluso edificios. Esto es una gran cadena en la que si uno se resfría, todos comienzan a estornudar. Es el momento para que las empresas apuesten por una manera más competitiva y ecológica de crear. El desafío está sobre la mesa y ahora es el momento de comenzar con la estrategia.
Un ejemplo de reinventarse
Llamamos a la puerta de Jorge Sempere, una empresa que ofrece un servicio íntegro para la industria de tejidos de calada, desde maquinaria textil usada, hasta recambios, fabricación de monturas Jacquard y recambios para maquinaria Jacquard. Y que se ha sabido amoldar a los nuevos tiempos. Desde sus nuevas instalaciones cubre de forma rápida y eficaz la demanda de sus clientes que año tras año confían en su saber hacer y calidad de servicio.
Además, su servicio de compra-venta de maquinaria textil usada únicamente cuenta con máquinas de alta calidad, como la máquina Jacquard, que han pasado por estrictos controles con el fin de garantizar el correcto funcionamiento y la eficiencia de las mismas.
Durante los meses pasados, estas empresas de Alcoy han sabido cambiar el chip. Las empresas emplazadas principalmente en la comarca de L’Alcoià, El Comtat y la Vall d’Alabida pudieron fabricar mascarillas gracias a un proyecto liderado por la Conselleria de Economía, y a la colaboración de la patronal, ATEVAL, y, sobre todo, del Instituto Tecnológico del Textil (Aitex), con sede en Alcoy, que es quien ha certificado el producto final después de estar los materiales.
El producto está confeccionado con los siguientes materiales: un 100% de polipropileno hidrófobo, en la parte posterior de la mascarilla, con 40 gramos por metro cuadrado; 80% de poliester y 20% de viscosa, con 44 gramos por metro, y otra capa de polipropileno hidrófobo, en la parte exterior, de 20 gramos. Así es cómo se pusieron manos a la obra en un momento de zozobra y donde más se necesitaba la ayuda de todos.
Objetivos en Europa
Además de poder reinventarse en otros sectores, desde Europa se tiene planteado un nuevo plan para ofrecer el mejor rendimiento. Así Euratex quiere establecer cinco centros de reciclaje en Europa cerca de los distritos textiles y de confección y, por lo tanto, fabricar materias primas recolectando, clasificando, procesando y reciclando los desechos textiles post-producción y post-consumo.
La idea es invertir en textiles innovadores y sostenibles a través de una asociación público-privada (APP) dedicada a nivel de la UE. Estos PPP agruparán y acelerarán la investigación, la innovación, las pruebas piloto y la demostración en áreas críticas, como la fabricación digital y las cadenas de suministro. a fuerza laboral textil y de la confección está envejeciendo, ya que el 35% tiene más de 50 años. Las PYME deberían mejorar su fuerza laboral existente para cumplir con una industria en rápida transformación y atraer a trabajadores y profesionales jóvenes bien calificados.
“Esta crisis ha mostrado la importancia de nuestra industria y ahora, más que nunca, es esencial para desarrollar la competitividad del ecosistema europeo. El paquete “La próxima generación de la UE” puede desempeñar un papel importante y apoyar a la industria textil y de la confección en su renacimiento “, afirmó Alberto Paccanelli.
Esta es la radiografía del sector textil en España, pero como has visto se extiende a toda Europa. ¿Qué hacer? Lo primero mantener la prudencia, para posteriormente atajar el problema. Hay que reinventarse pero desde unos cimientos sólidos para, como te decíamos al principio, aprovechar esta crisis para hacer de ella toda una oportunidad. Si otras veces la industria lo ha hecho, estamos seguros de que ahora lo volverá a hacer.