En un estudio realizado por La Asociación Española del Aluminio y Tratamiento de Superficie (AEA) se muestra cómo es posible ahorrar más de un 16% del consumo en climatización, sencillamente cambiando nuestros antiguos cerramientos por otros nuevos y más eficientes así como sostenibles.
Precisamente, unas ventanas nuevas y adecuadas no solo aíslan acústicamente nuestro hogar sino que también son un buen aislamiento térmico y ofrecen una mayor seguridad.
Por esta razón, es importante que a la hora de conseguir un sistema de cerramientos adecuado, funcional y duradero acudamos a los mejores profesionales.
En este sentido, Aluminios Franco, son fabricantes y distribuidores de aluminio en sus diferentes aplicaciones, entre ellas las de fabricación de ventanas.
Entre sus diferentes servicios, se encuentran el de ventanas abatibles, correderas, además de otros servicios industriales como sus laminados.
Por otro lado, su filosofía y valores parten de ofrecer la mayor calidad, comodidad y satisfacción en todos sus servicios. Su compromiso con el medio ambiente les hace innovar y ofrecer un material limpio, de mínimo mantenimiento y un 100% reciclable, siendo incuestionable su durabilidad y futuro.
La Importancia de un Buen Cerramiento con Aluminio
Las características de cada elemento presente en la vivienda hace que esta gane o pierda en confort, si todos los elementos contribuyen de una forma integral a mejorar las condiciones de habitabilidad y confort estaremos sacando el máximo partido a nuestro hogar.
Es por esta razón que las ventanas y cerramientos son una parte fundamental a tener en cuenta en el aislamiento de nuestra vivienda. Cuanto mejor funcionen estos elementos mejor será el aislamiento del exterior, sea al frío los meses de invierno o al calor los meses de verano.
De esta manera, estaremos ahorrando nuestro consumo energético al sacar el máximo partido de las estructuras y materiales que aíslan nuestro hogar, principalmente en puertas y ventanas.
En el estudio realizado por AEA se separan los elementos que intervienen en el cerramiento, y se muestra la contribución de cada uno en la manera en que reducen el gasto energético total.
Es por esto que es importante pararnos a pensar cuál será el material que elijamos para nuestras ventanas nuevas.
En caso de ser aluminio, estaremos apostando por un ahorro energético, por lo general, superior. El ahorro que podemos conseguir al cambiar el marco por un material como el aluminio es considerable, aquí entran en juego cualidades de este material como son su durabilidad e inalterabilidad, que son aspectos en los que el aluminio es un material imbatible.
Precisamente, este material es un metal habitual en la producción industrial. Es muy resistente, inoxidable y con un excelente comportamiento como aislante térmico que, por sus excelentes cualidades, se ha ido introduciendo cada vez más en construcción.
Por esta razón, es tan idóneo para los sistemas de impermeabilización y aislamiento térmico, de elementos estructurales y, especialmente, en elementos prefabricados para fachadas y cubiertas o ventanas.
A su vez, las posibilidades constructivas y de acabados que tiene son infinitas. De este modo, los cerramientos con mínimo marco y mayor vidrio mantiene la dureza y resistencia de la estructura.
El aluminio es el material más duradero. Pueden pasar generaciones y la ventana permanecer inalterada.
De hecho, son cada vez más exigentes y numerosos los diseños y proyectos que se realizan en las nuevas edificaciones con el aluminio como material, puesto que se adapta sin problema a todas las exigencias y cumple con todas las expectativas.
En cuanto a la seguridad de este material, en caso de robo o incendio podemos estar tranquilos, ya que el aluminio es garantía de seguridad. No se quema y no desprende humos tóxicos.
Todo ello, lo convierte en un material muy interesante para nuestras ventanas nuevas, si bien, uno de los factores claves es el factor medio ambiental. El aluminio es el segundo elemento más abundante en la corteza terrestre, sus aplicaciones son infinitas y es 100% reciclable, utilizando únicamente un 5% de la energía que se utilizó en su fabricación.
Por ello, la decisión de cambiar nuestras ventanas por otras con este material solo presenta ventajas, además de que estamos apostando por un sistema que nos ayudará a conseguir un hogar mas eficiente en términos energéticos.